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Dentro del la nueva Alemania que quería construir Adolf Hitler tras su ascenso al poder en 1933, el deporte jugaba un papel fundamental. Hitler lo consideraba una herramienta clave, especialmente por la gran capacidad de influencia que podía ejercer sobre miles de jóvenes que lo practicaban. Para ello, nombró a Hans von Tschammer und Osten director de la recién creada Deutscher Reichsausschuss für Leibesübungen (Comisión alemana del Reich para el Ejercicio Físico) y poco después lo convirtió en Reichssportführer (Líder deportivo del Reich). Durante su mandato se celebraron los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936, considerados un éxito por el Führer. En la imagen se puede ver a Goebbels (de espaldas), Hitler (de perfil) y Hans von Tschammer en segunda fila sentados en las gradas durante una de las competiciones deportivas de la Olimpiadas. Algunas de las innovaciones introducidas por el equipo de Von Tschammer todavía siguen vigentes hoy en día, como por ejemplo el relevo de la antorcha olímpica en su camino hacia el pebetero.