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La trayectoria de George P. Vierheller en el zoo de St. Louis (EE.UU.) empezó en 1922 como secretario de la Junta de Control Zoológico, y al cabo de 6 años ya se había convertido en director de la entidad. Se retiró en 1962 después de 40 años en el zoo y, por lo general, es recordado con mucho aprecio por la gran dedicación con la que desempeñó su cargo. Sin embargo, a día de hoy, muchas de sus prácticas serían vistas con malos ojos, pues algunos tratos de daba a los animales no eran nada éticos. En ningún caso les maltrataba físicamente, pero los disfrazaba, los ponía en escenarios, les enseñaba a bailar, a ir en bici o a boxear. En la imagen sobre estas líneas se le puede ver trasladando a dos gorilas en su propio coche hasta el zoo en junio de 1938. Durante los años que estuvo al frente de la dirección, el zoo se convirtió en uno de los más importantes del país, con reconocimientos y premios por su labor. A su muerte, un periódico local lo bautizó como 'Mr. Zoo'.