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Cientos de miles de personas acudieron un 27 de septiembre de 1937 al centro de Berlín para acompañar a Adolf Hitler y Benito Mussolini durante el paseo que llevaron a cabo desde Heerstrasse Station hasta el Palacio de Hindenburg. La imagen de unidad de los dos líderes fascistas, tal y como se les puede ver en la fotografía, fue una manera tácita de certificar la alianza del Eje firmada un año atrás, coalición a la que poco después se añadiría el Imperio japonés. La visita oficial del líder italiano había empezado en Múnich, pero después recorrieron otras ciudades de Alemania, entre ellas la capital, donde fueron recibidos por un gran desfile militar al que asistieron alrededor de 750.000 personas. Tanto Hitler como Mussolini afirmaron que deseaban la paz y que actuarían en consecuencia para mantenerla, sin embargo lo cierto es que el Führer no haría otra cosa que violentar los acuerdos existentes hasta provocar el inicio de la Segunda Guerra Mundial en septiembre de 1939.