Actualizado a
· Lectura:
Después de llevar años instalado en Salamanca y participar activamente en la vida cultural de la ciudad, en 1920 Unamuno es profesor en la universidad y ostenta una cátedra. Además de sus novelas más célebres como Niebla o Abel Sánchez. Una historia de pasión, también escribe artículos de opinión para diferentes periódicos. En ellos se muestra muy crítico con el devenir político de España y ataca abiertamente al rey Alfonso XIII y a Primo de Rivera, que dirigía el país tras dar un golpe de Estado en 1923. Estos ataques le valieron el destierro a la isla canaria de Fuerteventura, de donde se marchó a Francia cuando recibió el indulto. En la imagen le vemos en su despacho de París en septiembre de 1924. Cuando cayó el régimen en 1930, Unamuno regresa a España para presentarse como concejal, salir elegido y proclamar la República española (1931-1939) desde el balcón del ayuntamiento de Salamanca.