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A pesar de que los alemanes estaban en retirada en la mayoría de los frentes europeos, para mucha gente en el verano de 1944 la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) estaba muy lejos de terminar. Los cinco años de guerra había dejado profundas secuelas entre la población. Muchos habían perdido sus trabajos y sus casas y se encontraban sin ningún medio para conseguir comida para los suyos. El gobierno inglés optó por utilizar escuadrones que lanzaban alimentos desde el aire, y además organizó un servicio de cocinas móviles que proporcionaban sandwiches, estofado y bebidas calientes a quienes lo necesitaban, tal y como se puede ver en esta imagen tomada en agosto de 1944. Estos vehículos todavía exhibían marcas de proyectiles de sus anteriores servicios cuando dando ayuda durante el última blitz en Inglaterra.