La revolución que desembocó en la independencia de EE. UU. ha tenido una extraña buena prensa. Comparada con la Revolución francesa y su reino del terror, pasa por un modelo de revuelta puramente patriótica y democrática, sin más víctimas que las de las contadas batallas con los británicos. Comparada con las guerras posteriores de EE. UU., como la de Secesión, la contienda de 1776-1783 parece algo «pintoresco e inocuo», como ha denunciado una historiadora. Este libro de Holger Hoock, profesor en la Universidad de Pittsburgh, muestra que esa impresión no podía ser más equivocada. Primero por las cifras. Los «patriotas» muertos en la guerra de independencia equivalen a más de 7 millones de la población actual estadounidense. Pero más aún por las características del conflicto, que Hoock presenta –con mucha razón– como una auténtica guerra civil, la primera de la historia de Estados Unidos. Atrocidades El autor ilustra este planteamiento con un riquísimo despliegue de datos y ejemplos del conflicto. La violencia que tiñó el nacimiento del país no sólo se dio en los campos de batalla o en los campamentos (como los latigazos disciplinarios, «como si un cuchillo me atravesara el cuerpo», en palabras de uno que los sufrió). También tomó la forma del saqueo de propiedades, las represalias contra la población nativa o negra o las violaciones de mujeres. El tratamiento de los prisioneros fue particularmente odioso, especialmente por los británicos, cuyos barcos-prisión no estaban muy lejos de los campos de concentración del siglo XX. Hoock no oculta los abusos en el campo patriota, pero acierta al no equiparar sin más ambos bandos. Destaca así iniciativas pioneras como el comité de investigación de atrocidades de guerra creado por el Congreso norteamericano, que publicó un detallado informe difundido por todo el mundo. Maniobra propagandística, sin duda, pero basada también en una auténtica convicción de la fuerza moral de la causa de la independencia. Decir que en términos de violencias e injusticias «la Revolución americana no fue una gloriosa excepción» no significa negar su trascendencia histórica. Las cicatrices de la independencia. Holger Hoock. Desperta Ferro, Madrid, 2021, 576 pp., 26,95 € La celebración del 150 aniversario de la Comuna de París es una excelente ocasión para descubrir un episodio mítico que fue ante todo una tragedia humana sin parangón. Disponemos al menos de dos estudios recientes en castellano: la buena síntesis de Roberto Ceamanos (La Comuna de París, Catarata, 2020, 224 pp.) y la obra de referencia del norteamericano John Merriman, que documenta con gran viveza la brutalidad de la represión (Masacre: vida y muerte en la Comuna de París, Siglo XXI, 2017, 408 pp.). Como testimonio de la época ha aparecido La Comuna de París: diario del sitio y la comuna de París, de Edmond de Goncourt, uno de los muchos escritores que se opusieron virulentamente a la Comuna (Pepitas de Calabaza, 2020, 304 pp.). En el otro extremo del arco ideológico figura la crónica de la revuelta de Prosper-Olivier Lissagaray. Este periodista de ideas anarquistas y socialistas participó personalmente en la resistencia final de los communards contra el asalto del ejército versallés y luego vivió varios años en el exilio, donde elaboró una crónica del movimiento día por día, consignando todo lo que vio y le contaron los mismos protagonistas. Sin retórica, dando simplemente cuenta de lo sucedido en toda su crudeza, Lissagaray compuso un relato de excepcional verismo sobre el martirio que sufrió el París popular a manos del ejército de su propio país. Historia de la Comuna de París de 1871. Prosper-Olivier Lissagaray. Capitán Swing, Madrid, 2021, 656 pp., 25 € Es inevitable tener cierto recelo ante un libro de historia antigua escrito por un autor que en la primera línea se define como un nerd de la ciencia ficción y que reconoce que su interés por la historia militar de Grecia y Roma se origina en juegos de vídeo, films como 300 o recreaciones históricas de batallas. Y que esgrime además el haber combatido hasta en tres ocasiones en la guerra de Iraq, aunque nos tranquiliza un tanto al precisar que «aborrezco la guerra sin reservas» (hoy es «consultor de seguridad e inteligencia»). Pero lo cierto es que el libro no sólo cumple con las exigencias de una obra de historia seria, sino que la peculiar trayectoria del autor le da una comprensión del tema que no es habitual en la historia académica. Este tema es el choque entre la falange griega y la legión romana. Cole empieza describiendo las características de cada formación y luego analiza seis batallas de los siglos III y II a.C. que las pusieron frente a frente, terminando con la de Pidna (168 a.C.), que supuso la derrota definitiva de la falange. La exposición de Cole, clara y ágil (el autor es también un popular novelista de ciencia ficción), está siempre apegada al terreno, a la realidad concreta de los combatientes. De su mano entendemos mejor lo que fue la experiencia de batalla de los hombres que integraron las más temibles formaciones de combate de la Antigüedad. Legiones frente a falanges. Myke Cole. Alianza, Madrid, 2021, 312 pp., 22 € El conocido ilustrador Jean-Claude Golvin recorre en este volumen las grandes realizaciones de los legionarios romanos: canales, acueductos, calzadas, puentes... además de sus campamentos y las ciudades que ayudaron a fundar. Imágenes espléndidas para ver y para estudiar. La ingeniería del ejército romano. J.-C. Golvin y G. Coulon. Desperta Ferro, Madrid, 2021, 127 pp., 26,95 € La atractiva figura de Flavio Aecio, general que bajo Valentiniano III (425-455) hizo frente al embate de los «bárbaros» que acechaban el Imperio, protagoniza esta buena novela histórica en la que encontramos batallas, conspiraciones, travesías y una magnífica evocación del ocaso de Roma. El salvador del Imperio. Flavio Aecio. José Luis Sánchez Iglesias. Almuzara, Córdoba, 2021, 336 pp., 17,95 € Aunque no es la divinidad más conocida por el gran público, Hécate, diosa dispensadora de bienes y riqueza, pero también asociada con la magia y los encantamientos, constituye, sin duda, una de las figuras más fascinantes del panteón griego. Así lo muestra Mario Agudo en esta monografía muy bien documentada en la que explica lo que sabemos sobre los orígenes anatolios de la diosa y de su culto, sus triples representaciones, su relación con hechiceras, magos y chamanes, su papel en los cultos del inframundo y sus metamorfosis en la época cristiana. Cabe destacar el gran número de ilustraciones a color que acompañan el texto y que ofrecen una completa iconografía de la «diosa sombría». Hécate. La Diosa Sombría. Dilema, Madrid, 2020, 268 pp., 15 € Este artículo pertenece al número 209 de la revista Historia National Geographic.