Las aventuras del arqueólogo Indiana Jones le han llevado por todo el mundo en busca de reliquias históricas y legendarias, desde el Arca de la Alianza o el Santo Grial hasta un misterioso mecanismo de la antigua Grecia, pasando por piedras místicas y enigmáticas calaveras de cristal.
En algunos casos se trata de objetos que existen, como el que centra la última película de la saga, Indiana Jones y el dial del destino, que trata sobre el mecanismo de Anticitera, un antiguo artefacto griego del siglo II a.C. En otras ocasiones se trata de objetos bíblicos como el Arca de la Alianza o el Santo Grial, que mueven el argumento de En busca del arca perdida e Indiana Jones y la última cruzada respectivamente, cuya existencia es considerada más o menos legendaria. También tenemos falsificaciones como las misteriosas calaveras de Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal, u objetos directamente ficticios basados en las leyendas hindúes como las piedras de Shankara de Indiana Jones y el templo maldito.
Aunque el argumento de las películas incluya muchas libertades creativas, la mayoría de los objetos en los que se basa la trama tienen una base legendaria o, en algunos casos, histórica. Esta es la historia real o mítica que hay detrás de cada película.
En busca del arca perdida
La primera película, En busca del arca perdida, trata sobre uno de los objetos más importantes de la tradición abrahámica: el Arca del Alianza, una caja de madera recubierta de oro que, según el Antiguo Testamento, contenía las tablas con los diez mandamientos que Dios confió a Moisés. Cuando el rey babilonio Nabucodonosor II invadió el reino de Judá en el siglo VI a.C., el arca supuestamente fue escondida en un lugar secreto, que según algunos registros se encontraba en una cueva del Monte Nebo, en la actual Jordania.

Indiana Jones 1 Arca de la Alianza (Aubry Françon)
Reconstrucción del Arca de la Alianza en la catedral de Saint Charles de Saint-Etienne (Francia).
Aubry Françon
Los arqueólogos nunca han llegado a ponerse de acuerdo sobre si el Arca de la Alianza existió realmente tal y como se describe en las escrituras sagradas. Algunos la consideran un objeto real, otros un simple mito e incluso hay quien baraja una teoría intermedia: que realmente existiera pero no desde los tiempos de Moisés, sino que fuera una falsa reliquia fabricada por orden de los reyes de Judá como prueba de su legitimidad frente a su vecino del norte, el reino de Israel.
Varios lugares afirman que el Arca de la Alianza es real y que está en su posesión. La más famosa es la que se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora de Sion en Axum (Etiopía), que según la narración de la Iglesia etíope habría sido llevada allí en secreto por el emperador Menelik, hijo del rey Salomón y la reina de Saba. Supuestamente nadie puede verla salvo el monje encargado de custiodarla, pero un especialista en Estudios Etíopes de la Universidad de Londres, Edward Ullendorff, declaró haberla examinado cuando estuvo destinado a Etiopía durante la Segunda Guerra Mundial y afirmó que se trataba de una fabricación de época medieval.
El templo maldito
La segunda película en estrenarse, aunque primera en orden cronológico de la saga, es Indiana Jones y el templo maldito. En esta, el arqueólogo viaja a China y la India siguiendo la pista de unas misteriosas rocas llamadas piedras de Shankara, que supuestamente fueron entregadas por el dios Shiva al erudito hindú Adi Shánkara. Las piedras de Shankara son el único motivo argumental de la saga que es completamente ficticio, creado ad hoc para la película, pero están basadas en las piedras lingam, una representación simbólica del dios Shiva.

Indiana Jones 2 Piedra lingam (Adam Jones)
Piedra lingam en el templo de Patalpuri de Allahabad (Uttar Pradesh, India).
Adam Jones
En cambio, Adi Shánkara sí existió en la realidad. Este erudito del siglo VIII es el fundador de la doctrina advaita, una de las tradiciones hinduístas más antiguas que existen. Aunque se conservan alrededor de 300 textos suyos (muchos de los cuales, probablemente, son en realidad de sus discípulos) se sabe muy poco sobre su historia personal.
La película es la más controvertida de la saga por su representación de los hindúes y de los chinos, presentados como gente atrasada y supersticiosa: a los primeros los vincula con sacrificios humanos y a los segundos con el crimen organizado. Algunos de los participantes en la película, incluyendo indios, rebatieron que se trata de una obra de ficción y que no pretendía ser realista.
La última cruzada
La tercera película, Indiana Jones y la última cruzada, se centra en la búsqueda del Santo Grial por parte de los nazis, que también iban tras el Arca de la Alianza en la primera entrega de la saga. Es cierto que el Tercer Reich dedicó bastante esfuerzo a la búsqueda de estas y otras reliquias a las que se atribuía poderes míticos.
El Santo Grial es un cáliz mítico que, supuestamente, fue usado por Jesucristo durante la Última Cena. Aparece por primera vez en el relato Perceval y la leyenda del Santo Grial, escrito en el siglo XII por el poeta Chrétien de Troyes, autor de varios pasajes de la leyenda del Rey Arturo. Según esta historia, el cáliz fue usado por José de Arimatea para recoger la sangre de Jesucristo en el momento de su crucifixión, otorgándole el don de conceder la vida eterna a quien bebiera de él.

Indiana Jones 3 Santo Cáliz (Fernando Pascullo)
El Cáliz Santo de la Catedral de Valencia, identificado en algunos textos medievales con el Santo Grial.
Fernando Pascullo
El Grial ha estado ligado a numerosas teorías pseudohistóricas, que lo vinculan sobre todo a la orden de los Templarios. Sin embargo, no hay ninguna base histórica que sostenga esta leyenda, según la cual uno de los discípulos de Jesús se habría llevado la copa después de la cena: ¿Por qué cometer tal robo y por qué dicha historia no aparece hasta doce siglos después en un relato trovadoresco?
Aun así, a lo largo de la historia muchos han creído en el Grial, ya fuera como fuente de un poder místico o como simple reliquia sagrada. Es cierto que los nazis – en particular, el medievalista Otto Rahn – lo buscaron con ahínco y, al igual que con el Arca de la Alianza, varios lugares afirman tener el cáliz auténtico: uno de ellos es el que se encuentra en una capilla de la Catedral de Valencia.
El reino de la calavera de cristal
Casi 20 años después de su última aventura, el ya veterano arqueólogo regresó a las pantallas en Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal. En esta ocasión la trama se centra en los cráneos de cristal, unas calaveras talladas en cristal de roca que aparecieron por primera vez a finales del siglo XIX en manos de un comerciante de antigüedades. Afirmaba haberlos adquirido en México y aseguraba que se trataba de objetos precolombinos de origen maya o azteca.
Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Las investigaciones realizadas durante el siglo XX en varios de los cráneos revelaron que se trataba de falsificaciones modernas, algunas de las cuales no tenían ni diez años de antigüedad. Habían sido fabricadas usando herramientas de joyería y, además, el análisis químico del material demostró que se trataba de un tipo particular de roca de cristal que no se encuentra en Mesoamérica.

Indiana Jones 4 Calavera de Cristal (British Museum, Rafał Chałgasiewicz)
Uno de los cráneos de cristal, que forma parte de la colección del British Museum.
British Museum / Rafał Chałgasiewicz
La película tiene otro elemento histórico, aunque presentado con varios errores: la búsqueda de la ciudad mítica de El Dorado por parte del conquistador español Francisco de Orellana. Dicha búsqueda tuvo lugar realmente, pero al contrario de lo que se dice en la trama, Orellana no desapareció mientras buscaba El Dorado: la expedición no encontró la mítica ciudad, pero llegó a su destino marcado y Orellana sobrevivió a ella. Murió unos años más tarde, en 1546, durante una exploración que buscaba determinar la rama principal del Amazonas.
El dial del destino
La quinta y última película de la franquicia, Indiana Jones y el dial del destino, es la única cuya trama gira alrededor en un objeto real, si obviamos las calaveras de cristal por tratarse de falsificaciones. Dicho objeto es el mecanismo de Anticitera, un misterioso artefacto recuperado a principios del siglo XX entre los restos de un naufragio, en aguas de la isla de Anticitera, en el mar Egeo.
El mecanismo ha sido fechado entre los años 200 y 100 a.C. y es una especie de calendario mecánico diseñado para predecir la fecha de los fenómenos astronómicos, como eclipses y la posición de las estrellas. Accionando una manivela los engranajes del mecanismo giraban, y moviendo el dial hasta un día concreto se obtenían diversos datos como la posición del Sol, la Luna y los diversos planetas, la fase lunar e incluso los eclipses.

Indiana Jones 5 Mecanismo de Anticitera (Museo Arqueológico Nacional de Atenas, Joyofmuseums)
Fragmentos del Mecanismo de Anticitera, en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas.
Museo Arqueológico Nacional de Atenas / Joyofmuseums
El objeto no ha sido recuperado por completo, sino por piezas, que se exhiben en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas. Sabemos cómo funcionaba gracias a las descripciones de mecanismos parecidos en textos clásicos: Cicerón menciona en sus escritos unas máquinas parecidas inventadas por Arquímedes, que vivió pocas décadas antes de la fecha en la que está datada el mecanismo de Anticitera.
Otro elemento histórico que se menciona en la película es el hecho de que el gobierno de EE.UU. reclutó para su programa espacial a científicos que habían estado vinculados al régimen nazi. El caso más notable es el de Wernher von Braun, el ingeniero inventor del cohete V2, que fue el “padre” de los cohetes que usaron tanto EE.UU. como la URSS para lanzar sus primeros satélites. El empleo de personas que habían servido e incluso militado activamente en el régimen nazi, como von Braun, fue objeto de un encendido debate y fuertes críticas.