Ciudad perdida

Un nuevo estudio sitúa a la ciudad vaccea de Intercatia en Paredes de Nava

Gracias a un innovador método de análisis, las evidencias sitúan a la ciudad perdida de Intercatia en la provincia de Palencia. La capital del pueblo vacceo resistió de manera encarnizada ante los ataques romanos, pero se perdió su pista con el declive del Imperio. El modelo, basado en la probabilidad y las coordenadas ptolemaicas, permite situar con mayor exactitud las calzadas romanas y las ciudades que conectaban.

Primer segmento de la Tabula Peutingeriana de calzadas romanas.

Primer segmento de la Tabula Peutingeriana de calzadas romanas.

Foto: Biblioteca Agustiniana

Año 151 a. C., las legiones del ejército republicano romano están a las puertas de Intercatia, una fortaleza indígena de orígenes celtas y perteneciente al pueblo de los vacceos, que está preparada para defender su libertad. Meses atrás, los romanos habían arrasado otra importante ciudad vaccea llamada Cauca, sin dejar apenas supervivientes.

Los romanos fueron la mayor potencia bélica del mundo conocido y avanzaban imparables cosechando victorias por toda la península ibérica. Les acompañaba un joven militar que acabaría siendo leyenda: Escipión Emiliano Africano.

Lo que sucedió a partir de entonces lo narra el historiador griego Apiano. Contra todo pronóstico, la ciudad-fortaleza resistió el asedio obligando a Roma a firmar una paz honrosa para ambas partes. Los romanos se vieron obligados a replegarse hacia el este para protagonizar uno de los asedios más famosos de la historia de la humanidad en la mítica ciudad arévaca de Numancia. Desde la caída de Numancia, se romanizan las ciudades de la meseta, incluida Intercatia.

A Intercatia se la ha considerado una ciudad perdida, puesto que después de la caída del Imperio romano desapareció en el tiempo.

¿Zamora, Palencia o Valladolid?

Quizás aquella hazaña heroica contribuyó a que las propuestas para su emplazamiento sean muy diversas, pues cubren un área geográfica extensa entre las provincias de Zamora, Palencia y Valladolid. Entre las opciones que se consideran están: Medina de Rioseco, Villanueva del Campo, Castroverde de Campos, Villalpando, Aguilar de Campos, Valverde de Campos, Ceinos de Campos, Montealegre y Paredes de Nava.

Excavaciones en el yacimiento arqueológico de Paredes de Nava (Palencia) que podrían corresponder a Intercatia.

Excavaciones en el yacimiento arqueológico de Paredes de Nava (Palencia) que podrían corresponder a Intercatia.

Foto: Javier Abarquero Moras, cortesía del autor.

La mayor parte de las hipótesis para su ubicación están basadas en los itinerarios romanos. En cambio, la opción de Paredes de Nava está basada en los hallazgos epigráficos descubiertos en dicha ciudad. En estas epigrafías se cita la ciudad objeto de estudio, lo que hace verosímil que sea su ubicación real. Sin embargo, esta opción parecía encajar mal con los itinerarios citados por las fuentes antiguas, por lo que la contradicción entre las fuentes históricas y las evidencias arqueológicas hizo que su búsqueda alcanzara un punto muerto.

Herramientas para localizar ciudades y calzadas

Las fuentes geográficas históricas que se han utilizado para el estudio de las ciudades han sido, fundamentalmente, los itinerarios romanos y la obra Cosmografía de Ptolomeo.

Mapa del oeste de la península ibérica en la Cosmografía de Ptolomeo.

Mapa del oeste de la península ibérica en la Cosmografía de Ptolomeo.

Foto: Biblioteca Digital Hispánica

Los itinerarios romanos son una serie de rutas por las calzadas del Imperio romano que se describen a partir de las ciudades por las que transcurren y las distancias entre ellas. Por su parte, Ptolomeo fue el geógrafo griego que estableció en su obra Cosmografía la latitud y longitud de las principales ciudades del Imperio.

Un nuevo método basado en la estadística

En un nuevo estudio recientemente publicado en la revista Journal of Cultural Heritage, se desarrolla un nuevo método para la localización de vías romanas. La herramienta está basada en la localización de las ciudades que por las que transcurren, midiendo la probabilidad de que una localización concreta corresponda con una determinada ciudad romana.

El método se basa en un estudio estadístico sobre las coordenadas ptolemaicas. Si bien estas coordenadas tienen imprecisiones, en el trabajo se demuestra que tienen una relación lineal con las coordenadas reales. Por lo tanto, aunque no permiten posicionar exactamente las ciudades, sí permiten establecer el área de mayor probabilidad de localización de la misma.

Hasta ahora, había autores que desestimaban dichas coordenadas y otros que intentaban desarrollar teorías para ajustarlas a las reales. La idea de usarlas para valorar la probabilidad de las localizaciones es un concepto nuevo. El método permite calcular la probabilidad de que una localización se corresponda con la ciudad considerada y valorar la viabilidad de las diferentes propuestas para su emplazamiento. Como resultado, permite reconstruir el trazado de la calzada romana que transcurre por la mencionada ciudad.

Aplicación del método a una calzada

Para ponerlo en práctica, el caso de estudio ha sido la via ab Asturica per Cantabriam Caesaraugustam del Itinerario de Antonino. En lo que se refiere a la via analizada, los errores en las distancias descritas en el Itinerario son muy acusados. El trazado de esta via constituye un gran desafío y existen dispares interpretaciones del mismo.

El Itinerario Antonino recoge las rutas del Imperio romano.

El Itinerario Antonino recoge las rutas del Imperio romano.

Foto: Biblioteca Digital de la Real Academia de Historia

Uno de los precursores en el estudio del trazado de las calzadas romanas fue Saavedra, quien presentó un mapa en el que están localizadas todas las viae de la península ibérica citadas en el Itinerario de Antonino.

El elemento más conflictivo en la descripción del tramo considerado es precisamente la ubicación de la estación correspondiente a la ciudad de Intercatia. Su localización permitiría establecer la dirección de la calzada.

¿Dónde estuvo Intercatia?

Al implementar el método para determinar la posición de Intercatia, dentro de las diferentes localizaciones posibles, Paredes de Nava resultó la más probable, siendo la única que se encuentra dentro del área de mayor probabilidad. Tradicionalmente se había considerado la opción de Villalpando, que es la menos probable según el método de estudio, con una probabilidad menor del 30%.

Siendo Paredes la opción geográficamente más probable y existiendo dos evidencias epigráficas donde se cita el gentilicio de la ciudad buscada, las pruebas apuntan a que en esa localización se situó Intercatia. Como consecuencia, se ha propuesto una variante sobre el trazado para el camino 27 propuesto por Saavedra.

La España deshabitada, la España arqueológica

Todavía queda mucho por avanzar en la localización de ciudades antiguas y el trazado de calzadas romanas. Potenciar su conocimiento cumple tres objetivos que figuran en el programa de la mayor parte de los partidos políticos en España: afianzar el sentimiento de identidad europea, la retención del talento y una solución para la España deshabitada.

La historia permite encontrar las raíces comunes de los pueblos del viejo continente. Además, la financiación de proyectos de investigación en este área permite que los jóvenes cualificados no deban emigrar a universidades de otros países debido a falta de oportunidades, creando una estructura de puestos de trabajo atractiva que retiene el talento.

Finalmente, la casualidad ha querido que las mayores joyas arqueológicas en la Península Ibérica residan en la España deshabitada. Incentivando las excavaciones e incrementando el conocimiento sobre las mismas potenciaría el turismo cultural como una alternativa al también necesario turismo de playa.

*Jesús María Romera Aguayo es profesor agregado en la Escuela de Ingeniería de la Universidad del País Vasco, mientras que Heriberto Pérez-Acebo es profesor de Infraestructura del Transporte también en la Universidad del País Vasco. Esta nota apareció originalmente en The Conversation y se publica aquí bajo una licencia de Creative Commons.