Abel G.M.
Periodista especializado en historia y paleontología
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Una excavación reciente en el conjunto de Arthur's Stone, en el oeste de Inglaterra, ha concluido que los pobladores neolíticos de Gran Bretaña levantaban mausoleos de madera como parte de los conjuntos megalíticos. Estos consistían en construcciones provisionales en las que se colocaba a los difuntos antes de ser enterrados en sus tumbas definitivas: una suerte de velatorios de la Edad de Piedra, salvando las diferencias.
Los arqueólogos sostienen que estos mausoleos eran erigidos como primera fase del ritual de enterramiento, tal vez de forma similar a un velatorio, tras lo cual eran quemados. Los restos se incorporaban al túmulo funerario definitivo, que en ocasiones era marcado con un dolmen o menhir. A veces se encuentran también restos de herramientas, como hachas o cuchillos de piedra.
El conjunto de Arthur's Stone
La excavación se ha llevado a cabo en Arthur's Stone (la piedra de Arturo), un monumento megalítico situado en Herefordshire, oeste de Inglaterra. El lugar está asociado a varios episodios de las leyendas del rey Arturo, pero en realidad fue erigido alrededor del año 3700 a.C. En 2013 se realizaron excavaciones en un sitio cercano, durante las cuales se descubrieron los restos de estos mausoleos de madera enterrados en túmulos funerarios de la Edad de Piedra. Ahora, las investigaciones en Arthur's Stone han revelado que este monumento y los túmulos funerarios formaban parte de un único gran complejo funerario.
“Nuestras excavaciones revelaron tres largos montículos similares en construcción a lo que ahora se sabe que fue la primera etapa de Arthur's Stone”, explica el profesor Julian Thomas de la Universidad de Manchester, que ha liderado la excavación. “Cada uno de estos tres montículos se había construido sobre la huella de un gran edificio de madera que había sido quemado deliberadamente”. Según el profesor, Arthur's Stone estaba originalmente conectado mediante una avenida de postes al campo cercano donde se encontraron los túmulos en 2013, formando parte de “un paisaje ceremonial neolítico integrado”.