Àlex Sala
Periodista especializado en Arte e Historia del Arte
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Ficha técnica
Laocoonte y sus hijos
Autores: Agesandro, Polidoro y Atenodoro de Rodas
Técnica: escultura en mármol
Fecha de creación: 40-30 a.C.
Ubicación: Museos Vaticanos, Roma
Los textos antiguos hablaban de una de las esculturas más bellas de todos los tiempos: Laocoonte y sus hijos. Representaba el episodio de la muerte del sacerdote troyano y sus vástagos defendiéndose de las terribles serpientes que los atacan y se enroscan en su cuerpo en una lucha a muerte. Los gestos y las contorsiones de sus protagonistas eran de un patetismo asombroso y la colocaban, al parecer de Plinio el Viejo "por delante de todas, no solo del arte de la estatuaria sino también del de la pintura". El naturalista habría visto esta obra de arte en el palacio del emperador Tito en el siglo I d.C., pero pronto dejó de saberse de ella y se creía completamente perdida hasta que 1.500 años después, en 1506, alguien que iba a construirse una casa en una zona de viñedos de la colina del Esquilino, en Roma, desenterró una enorme escultura. De inmediato, el papa Julio II envió al lugar (situado sobre los antiguos palacios de Nerón y de Tito) a Miguel Ángel y al arquitecto Giuliano de Sangallo, que de inmediato afirmó "Eso es el Laocoonte que dice Plinio", la obra maestra perdida hacía más de un milenio y que volvía a renacer en todos su esplendor.