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Una remota cueva en el norte de Australia fue el lugar donde unos indígenas australianos pintaron diversas embarcaciones que han tenido desconcertados a los arqueólogos desde su descubrimiento, hace unos cincuenta años. Ahora, en un estudio que acaba de ser publicado en la revista Historical Archaeology, un grupo de arqueólogos de la Universidad de Flinders, en Australia, afirma haber resuelto el enigma. Según ellos, las pinturas representarían "embarcaciones de combate" procedentes de Maluku Tenggara, en la actual Indonesia.
En el estudio, los arqueólogos han identificado los barcos como buques de guerra de las Molucas, un archipiélago frente a la costa este de Indonesia que se encuentra al norte de Australia, lo que hace suponer a los investigadores que tal vez hubo algún tipo de violencia entre los indígenas y los "visitantes" llegados del sudeste asiático.
"De repente, estas dos naves añaden otra dimensión a la esfera de interacción confirmando de que Australia no era un lugar aislado y solitario en medio de la nada", ha declarado Daryl Wesley, uno de los autores del estudio, que es arqueólogo y profesor titular de la Universidad de Flinders.

Mapa Mick de Ruyter en el que pude verse la Tierra de Arnhem, en Australia, y Maluku Tenggara, en el archipiélago de las Molucas.
Mapa Mick de Ruyter en el que pude verse la Tierra de Arnhem, en Australia, y Maluku Tenggara, en el archipiélago de las Molucas.
Flinders University
Naves de combate de las Molucas
Se sabía que los habitantes de las Molucas habían mantenido contactos con los aborígenes australianos, y ya se habían localizdo algunas pinturas rupestres en las que se representaron embarcaciones procedentes de las Molucas, incluidos los praos (barcos de vela de origen malayo) de Macasar. Aunque los dibujos que acaban de descubrirse tienen unas características que los hacen distintos: muestran banderas triangulares, banderines y adornos en la proa que indican, casi sin ningún género de duda, que eran barcos de guerra.
Se sabía que los habitantes de las Molucas habían mantenido contactos con los aborígenes australianos.

Imagen de un prao ceremonial procedente de las islas Molucas.
Imagen de un prao ceremonial procedente de las islas Molucas.
Nationaal Museum van Wereldculture
Como explica Wesley, los praos "son navíos de combate, decoradas con todos estos banderines y banderas y otros elementos que realmente las diferencian de las embarcaciones comerciales o pesqueras habituales. Eso es realmente diferente a nuestra comprensión de todos los demás barcos de Macasar que se encuentran representados en el arte rupestre y en la Tierra de Arnhem (en el norte de Australia)".
El conocimiento de los aborígenes
El nivel de detalle de las pinturas ha permitido a los investigadores afirmar que los aborígenes que crearon las pinturas tuvieron un perfecto conocimiento de aquellas embarcaciones, bien gracias a la observación o porque habían podido navegar en ellas. El estudio revela asimismo que la presencia de este tipo de pinturas tal vez sugiera que hubo algún tipo de violencia física por parte de los navegantes moluqueños, aunque será necesaria una investigación mucho más a fondo para conocer el auténtico propósito de estas representaciones.
El nivel de detalle de las pinturas ha permitido a los investigadores saber el grado de conocimiento que tenían los aborigenes de estos barcos.
"Estos motivos respaldan las ideas existentes de que los viajes esporádicos o accidentales de Indonesia a la costa australiana tuvieron lugar antes o al mismo tiempo que las visitas regulares de pesca de trepang (pepino de mar)", ha manifestado el autor principal del estudio, Mick de Ruyter, arqueólogo marítimo y profesor asociado en la Universidad de Flinders.
Evidencias científicas
Así, suponiendo que los moluqueños navegasen hasta Australia, la presencia de estos barcos de combate "respaldaría un cambio significativo de la narrativa aceptada de la pesca y el comercio de Macasar y proporcionaría una mejor comprensión del contacto real entre ambos grupos", afirma Wendy van Duivenvoorde, profesora asociada de Arqueología Marina en la Universidad de Flinders, que también ha participado en el estudio.
La presencia de estos barcos de combate respaldaría un cambio significativo de la narrativa aceptada de la pesca y el comercio de Macasar.

A la izquierda, pintura original del barco de guerra moluqueño, y, a la derecha, la misma pintura procesada con la técnica D-stretch.
A la izquierda, pintura original del barco de guerra moluqueño, y, a la derecha, la misma pintura procesada con la técnica D-stretch.
Darrell Lewis / Daryl Wesley
Paul Tacon, profesor del Centro de Investigación Social Cultural de la Universidad Griffith, en Australia, que no ha tomado parte en este estudio, cree que "esta rigurosa investigación muestra de manera convincente evidencia de contacto entre los aborígenes de la Tierra de Arnhem, en Australia, y los marineros de las islas Molucas hace cientos de años", comenta.
"Anteriormente se identificaron [barcos] de Macasar en el arte rupestre de la Tierra de Arnhem, y el más antiguo data de finales del siglo XVI y principios del XVII. Esta es la primera vez que se identifican pinturas rupestres de embarcaciones de las Molucas y es una suerte que las pinturas sean tan detalladas y presenten características muy distintivas", concluye el científico.