Fauna en la península ibérica

Descubren los restos de nueve dromedarios de época romana y andalusí en Córdoba

Los análisis realizados a los restos óseos de nueve dromedarios que hasta ahora se encontraban depositados en el Museo Arqueológico Provincial de Córdoba han convertido a la ciudad andaluza en uno de los principales yacimientos de la península ibérica donde se ha documentado la presencia de este animal. La investigación ha revelado asimismo que el dromedario estaba presente en la zona tanto en época romana como andalusí.

Los investigadores José Antonio Riquelme Cantal (izquierda) y Juan Manuel Garrido Anguita (derecha) muestran parte del hueso de la mandíbula de un dromedario actual.

Los investigadores José Antonio Riquelme Cantal (izquierda) y Juan Manuel Garrido Anguita (derecha) muestran parte del hueso de la mandíbula de un dromedario actual.

Los investigadores José Antonio Riquelme Cantal (izquierda) y Juan Manuel Garrido Anguita (derecha) muestran parte del hueso de la mandíbula de un dromedario actual.

Universidad de Córdoba

Aunque la posibilidad de encontrar evidencias de la presencia de dromedarios (Camelus dromedarius) en el pasado en la provincia de Córdoba ya había sido sugerida por las antiguas fuentes escritas, nunca antes se había identificado la presencia de estos animales en la misma capital.

El análisis de más de 150.000 muestras llevado a cabo por parte del grupo Investigación en Recursos Patrimoniales de la Universidad de Córdoba (UCO), junto con el CSIC-Granada, la UNED y la Universidad de Granada, ha permitido localizar e identificar los restos de nueve dromedarios en la ciudad y otros dos en el conjunto arqueológico de Medina Azahara, la ciudad califal fundada por Abderramán III en el siglo X. Los resultados de este estudio se han publicado en la revista Journal of Archaeological Science: Reports.

Según ha declarado el investigador de la UCO José Antonio Riquelme Cantal, "estos hallazgos han convertido a Córdoba en el yacimiento de la península ibérica donde la presencia de dromedarios es más clara en cuanto a número de individuos". Pero lo que hace aún más extraordinario este hallazgo es que los restos óseos de estos camélidos no solo datan de época andalusí, sino que se remontan incluso a época romana, un período en el cual hasta ahora no se había documentado la presencia de dromedarios en Córdoba.

Hallazgos de restos óseos de camélidos en la península ibérica durante época romana (azul) y medieval (rojo). 

Hallazgos de restos óseos de camélidos en la península ibérica durante época romana (azul) y medieval (rojo). 

Hallazgos de restos óseos de camélidos en la península ibérica durante época romana (azul) y medieval (rojo). 

Centro Nacional de Información Geográfica / Instituto Geográfico Nacional de España

Animales de carga

El análisis de estos hallazgos ha permitido a los investigadores ampliar aún más si cabe la historia faunística cordobesa "corroborando lo que decían las fuentes andalusíes sobre la existencia de dromedarios en la ciudad, y constatando su presencia durante el Imperio romano, algo que no se sabía", ha explicado Riquelme Cantal.

Según se desprende del estudio, al igual que en otros puntos de la península ibérica, fueron los romanos quienes introdujeron los dromedarios en Córdoba, aunque no sería hasta la llegada de los musulmanes cuando el dromedario, que se importaba de África para ser utilizado como animal de transporte o en campañas militare, se hizo más presente en la todo el territorio. 

Al igual que en otros puntos de la península ibérica, los romanos introdujeron los dromedarios en Córdoba.

Restos óseos de camélidos recuperados en Córdoba. Romanos: (1) cúbito+radio de Plaza Pineda; (2) mandíbula en Cercadilla; (3) 1ª falange en Cercadilla. Andalusí: (4) Cercadilla; (5) 2ª falange de la parcela 16A; (6) 1ª falange en Jardines de la Agricultura; (7) 1ª falange de las Subestaciones A1/2/3-Z; (8) 1ª falange de la calle J. Sama Naharro. Período indeterminado: (9) astrágalo en el Compás de

Restos óseos de camélidos recuperados en Córdoba. Romanos: (1) cúbito+radio de Plaza Pineda; (2) mandíbula en Cercadilla; (3) 1ª falange en Cercadilla. Andalusí: (4) Cercadilla; (5) 2ª falange de la parcela 16A; (6) 1ª falange en Jardines de la Agricultura; (7) 1ª falange de las Subestaciones A1/2/3-Z; (8) 1ª falange de la calle J. Sama Naharro. Período indeterminado: (9) astrágalo en el Compás de

Restos óseos de camélidos recuperados en Córdoba. Romanos: (1) cúbito+radio de Plaza Pineda; (2) mandíbula en Cercadilla; (3) 1ª falange en Cercadilla. Andalusí: (4) Cercadilla; (5) 2ª falange de la parcela 16A; (6) 1ª falange en Jardines de la Agricultura; (7) 1ª falange de las Subestaciones A1/2/3-Z; (8) 1ª falange de la calle J. Sama Naharro. Período indeterminado: (9) astrágalo en el Compás de la Iglesia de San Pablo.

José Antonio Riquelme et al.

Los investigadores sometieron los restos de cuatro ejemplares a análisis por radiocarbono e isótopos estables para identificar la especie y recabar información acerca de la edad, el origen de los animales y cuál era el tipo de plantas del que se alimentaban, puesto que algunas de ellas solo se dan en determinadas zonas. 

Para saber más

Unidad de jinetes otomanos en Beersheba durante la Primera Guerra Mundial

Camellos, 3.000 años de participación en guerras

Leer artículo

Finalmente, el estudio ha concluido que, sobre todo en época andalusí, los dromedarios, localizados principalmente en los arrabales de Córdoba, eran utilizados para el transporte de mercancías entre ciudades. También se ha documentado que, en algunos casos, los huesos de estos animales se empleaban para fabricar herramientas o elementos decorativos, tal como sugieren la recuperación de una mandíbula así como diversos huesos de las patas vinculados a un taller de artesanía.