Arte rupestre levantino

Descubren 14 pinturas rupestres en los bloques desprendidos de una cueva

El Espacio Natural Protegido Hoces de Cabriel, en la localidad conquense de Minglanilla, ha sido el escenario de un fenomenal descubrimiento en una cueva: dos bloques de piedra desprendidos de las paredes que contenían 14 pinturas rupestres. Los investigadores creen que los restos de ocre hallados junto a estos bloques, posiblemente usados para realizar las pinturas, permitirán conocer con bastante exactitud su antigüedad.

Dos de las figuras de cérvidos halladas en uno de los bloques de piedra desprendidos de una cueva del Parque Natural de las Hoces del Cabriel, en Minglanilla, Cuenca. 

Foto: Universidad de Castilla-La Mancha

En el año 1902, el arqueólogo aragonés Juan Cabré identificó unas figuras estilizadas que representaban a unos cérvidos. Estas figuras, que se encontraban ocultas en un abrigo rocoso situado en el barranco del Calapatá, en la provincia de Teruel, fueron las primeras que se adscribieron al llamado arte rupestre levantino, un tipo de representaciones, habitualmente pictóricas, que se extienden por todo el arco mediterráneo peninsular. De hecho, hasta aquel momento, la mayoría de pinturas que decoraban las paredes de diversas cuevas en la zona mediterránea, pintadas en color rojo, blanco o negro y que mostraban escenas de caza, habían pasado desapercibidas por completo a los investigadores.

Desde entonces se desató un encendido debate acerca de la cronología de todas aquellas pinturas. Mientras que unos las vinculaban con los últimos grupos de cazadores recolectores del área mediterránea otros las asociaban a la llegada de los colonizadores neolíticos desde el Mediterráneo. En este contexto, un equipo de investigadores y estudiantes dirigidos por los arqueólogos Juan Francisco Ruiz López, de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), y Virginia Barciela González y Ximo Martorell Briz, de la Universidad de Alicante (UA), han realizado un sorprendente descubrimiento en un abrigo del Espacio Natural Protegido Hoces del Cabriel (en Minglanilla, Cuenca).

Ejemplo de arte rupestre levantino en la Cueva del Escrito I, en Cuenca.

Foto: Clemens Schmillen / CC BY-SA 4.0

Un descubrimiento fundamental

Los arqueólogos han descubierto dos bloques que se habían desprendido de la pared rocosa del abrigo en los cuales se representaron 14 figuras de animales que tal vez podrían ofrecer algunas claves sobre la historia del arte levantino. Las figuras que más predominan entre las pinturas rescatadas son las que muestran a cabras y ciervos, y a pesar de que no se ha identificado ninguna figura humana, algunos de los animales sí aparecen con flechas clavadas en sus cuerpos. Ruiz López explica que "el descubrimiento tiene una importancia fundamental para la comprensión de este fenómeno cultural porque la cueva contiene objetos que podrían ser coetáneos con el momento de realización de las pinturas, algo que hasta el momento ha sido objeto de profundas discusiones y especulaciones".

Las figuras que más predominan entre las pinturas rescatadas son son las que representan a cabras y ciervos.

Imagen de uno de los animales pintados durante el Neolítico en el abrigo de Minglanilla, en Cuenca. 

Foto: Universidad de Castilla-La Mancha

A pesar de que las figuras son de pequeño tamaño (no alcanzan los cinco centímetros de longitud) sí que presentan un alto grado de detalle. Asimismo, el análisis por radiocarbono realizado a los restos orgánicos localizados en la cueva permitirá a los investigadores conocer el momento exacto en que fue ocupada. "El arte levantino presenta problemas de datación. No existe un marco cronológico seguro debido a que hay escasas posibilidades de datación directa de los pigmentos. De modo que, al haber bloques caídos sobre algunos estratos [sedimentos arqueológicos] podremos, si las condiciones son buenas, correlacionarlos con el contexto arqueológico y, de este modo, estaríamos más cerca de poder relacionarlo con las actividades de los cazadores-recolectores o con las de los pastores y agricultores", ha explicado Ruiz López.

Para saber más

Pic 1 Blombos Cave drawing with ochre pencil on silcrete stone Credit Craig Foster

El primer dibujo de la humanidad

Leer artículo

Los investigadores también tienen previsto analizar los restos de ocre rojo (óxido de hierro) que se han recuperado durante la excavación, lo que revelará si este mineral es el mismo que se empleó para crear las pinturas de las paredes. Ambos bloques, así como el resto de materiales recuperados en la cueva, serán llevados al Museo de Cuenca, donde podrán ser vistos por el público en un futuro. Casi todas las figuras del abrigo conquense fueron pintadas en tonos rojos, aunque también se han conservado tres pintadas en color blanco. Según Ruiz López, "las pinturas levantinas de color blanco son frecuentes en el núcleo de Albarracín, pero fuera de esta sierra turolense son muy excepcionales. Se conocen varias figuras blancas en Cataluña y diversos adornos en blanco añadidos a figuras rojas en abrigos de Castellón y Cuenca. Las de Minglanilla son, por tanto, las más meridionales que se han hallado nunca".