Descubierta una caja de madera en el interior de una pirámide de la dinastía XIII

En la caja aparece grabado el nombre de una mujer y, según parece, perteneció a la hija del faraón Ameny Qemau o a un familiar de la dinastía XIII

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Foto: Ministry of Antiquities, Egypt

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Caja de madera

Caja de madera con tres líneas de jeroglíficos, descubierta en la cámara funeraria de una pirámide la dinastía XIII en la necrópolis de Dahshur, al sur de El Cairo.

Foto: Ministry of Antiquities, Egypt

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Retirando los bloques de piedra

La caja ha aparecido al retirar los bloques de piedra que cubrían la cámara funeraria.

Foto: Ministry of Antiquities, Egypt

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Caja manipulada

La caja parece que fue manipulada antiguamente; contenía los cuatro vasos canopos del difunto, en los que se depositaban sus vísceras.

Foto: Ministry of Antiquities, Egypt

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Envoltorios de las vísceras

Los arqueólogos han encontrado en su interior los envoltorios del hígado, intestinos, estómago y pulmones del difunto.

Mapa: Google

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Lugar del hallazgo arqueológico

La curiosa caja con grabados en su exterior se ha descubierto en la necrópolis de Dahshur, al sur de El Cairo, en Egipto.

Para saber más

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La pirámide descubierta en Dahshur podría ser del faraón Ameny Qemau

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Una misión arqueológica egipcia ha localizado la cámara funeraria de la pirámide la dinastía XIII, o lo que queda de ella, descubierta recientemente en la necrópolis de Dahshur, al sur de El Cairo, y en su interior había una caja de madera con tres líneas de jeroglíficos, según reveló ayer el Ministerio de Antigüedades de Egipto. La caja ha aparecido al retirar los bloques de piedra que cubrían la cámara funeraria, según ha explicado Adel Okasha, el director de la misión arqueológica. Las líneas de jeroglíficos tenían una función ritual: proteger a los difuntos y, concretamente, al propietario de la tumba.

La caja parece que fue manipulada antiguamente; contenía los cuatro vasos canopos del difunto, en los que se depositaban sus vísceras. Los arqueólogos han encontrado en su interior los envoltorios del hígado, intestinos, estómago y pulmones del difunto. En abril, la misión arqueológica anunció el hallazgo de un bloque de alabastro entre las ruinas, grabado con diez columnas de textos jeroglíficos y que incluye el nombre del faraón Ameny Qemau, quien reinó durante unos dos años, alrededor del año 1790 a.C. En la caja aparece grabado el nombre de una mujer y, según parece, perteneció a la hija del faraón o a un familiar de la dinastía XIII. Las excavaciones también han sacado a la luz un sarcófago antropomorfo que se encuentra en mal estado de conservación.